También se aplica a instalaciones colectivas que no tengan fines comerciales. En caso de reducir un 30% el consumo de energías no renovables, podrías beneficiarte de una bonificación del 40%. Además, si resides en una comunidad de vecinos con placas solares y las mejoras afectan a todo el edificio, podrás obtener hasta el 60% de bonificación en el IRPF.